Los neumáticos son unos elementos tan cotidianos en nuestro día a día, e indispensables en cualquier vehículo de los que hay en circulación, que seguramente pocas veces te hayas preguntado sobre su origen y la evolución que han tenido a lo largo de su vida. Además, son muy pocas las alternativas y los proyectos de futuro que se plantean para sustituirlos. De momento cualquier taller de neumáticos tiene la vida asegurada.

Volviendo al tema que nos ocupa hoy, no está claro el origen de estas piezas, aunque se cree que a finales del siglo XIX, en torno a 1888, el veterinario escocés John Boyd Dunlop –seguro que el apellido te resulta familiar– fue su inventor al montar unos tubos inflados de caucho sobre las ruedas de un triciclo y cubrirlas con una especie de lona. Ese puede considerarse el nacimiento del uso de los neumáticos con cámara de aire.

No fue hasta 1891, apenas tres años después, cuando los hermanos Michelin logran fabricar un neumático más desarrollado para bicicletas. La idea surgió tras tener que afrontar la reparación de una de las cubiertas primitivas de Dunlop (anteriormente descritas) durante tres horas. Tras patentar el nuevo modelo desmontable, mucho más práctico y fácil de arreglar, los inventores incluso promovieron una carrera entre París y la sede de la compañía para probar su eficacia.

El siguiente paso en esta evolución fue la solución adoptada por C. K. Welch, que inventó una cubierta provista con cables de acero trenzado para logar una mejor fijación a la llanta. El paso definitivo no llegaría hasta 1895 cuando la firma Michelin patenta el primer neumático con cámara de aire para vehículos automóviles, todo un hito.

Otra de las compañías históricas nació en 1898 cuando Frank Seiberling creó la compañía Goodyear Tire and Rubber Company en honor al descubridor del caucho, Charles Goodyear. Aunque su producción se centró en un principio en la fabricación de neumáticos para bicicletas, en tan solo 18 años se convirtió en la compañía del sector más potente del mundo.  Poco a poco se fueron introduciendo mejoras como las del tacón primitivo que dejó paso a un refuerzo en los costados que fue rápidamente introducido por la mayoría de los fabricantes. Además de todos estos logros, en 1926 Goodyear se convirtió en la primera productora de caucho a nivel mundial.

A lo largo del siglo XX otras innovaciones fueron llegando, sobre todo en los años de su segunda mitad, cuando se adopta el montaje en capas radiales en lugar de las diagonales, algo que aunque descubierto hacia 1916 no se puso en marcha hasta mitad de la centuria.

Sea cuando fuere, lo cierto es que desde su nacimiento los neumáticos se han convertido en partes indispensables de nuestro día. Con el primitivo objetivo de hacer los viajes más confortables, estas cubiertas de caucho permitieron desarrollar negocios que tenían el transporte como su medio de vida. Actualmente, las distintas firmas no dejan de introducir novedades para contribuir a que los conductores puedan beneficiarse de ventajas como mayor seguridad ante las inclemencias meteorológicas o una resistencia y duración mayor. Una de estas mejoras es la existencia de neumáticos propios para el invierno y de cubiertas exclusivas para los meses de verano, algo que, aunque en nuestra tierra no está extendido, en otros países de Europa sí es algo cotidiano.

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